Esto nos dijo a un grupo de personas LGBT+ el año pasado Luis Medel, candidato a alcalde de Chihuahua, cuando buscaba apoyo para registrarse por la vía independiente. Nos mostró un proyecto progresista, incluyente y hasta emocionante sobre cómo cambiaría la forma de gobernar la ciudad. Con un extraño esquema piramidal pretendía reunir fondos para su campaña prometiendo puestos públicos a cambio de aportarle el equivalente a 3 o 6 meses del supuesto sueldo que ganarías si él llegaba al cargo.
Hubo quien sí le compró el discurso, pero no fueron suficientes. Así, terminó acercándose primero al nuevo partido “Fuerza por México”, y después al resucitado Partido Encuentro Solidario (antes Encuentro Social).
De un día para otro dejó de ser el rebelde liberal anti partidos, para volverse el defensor más férreo de las familias (las de papá, mamá e hijos, claro) y hasta celebró el “Día Internacional del Niño por Nacer”. Así de fuertes son las convicciones de los políticos, que hoy te ofrecen ayuda y mañana no te contestan el teléfono (ni los comentarios en Facebook).
Historias como esta se van a repetir en toda la república estas elecciones, políticos que cuando nos necesitan hasta se toman foto con la bandera LGBT+, pero a la hora de la hora…
Estoy seguro que este tema será importante en estas campañas, al menos en algunas zonas del país, así que habrá que seguirles la pista.